Sea como sea, en este intervalo no hice casi ni amago de coger la aguja, pero hace un par de semanas el ansia me pudo y me puse a elegir telas para un camino de mesa para mi comedor. Tenía bastante claro los colores que quería para él, así que fui a Lunares y rebusqué un ratito...
Ya sabéis que el rojo es uno de mis colores favoritos, y si lo combinamos con un color neutro, como el beige, logramos una combinación clásica y elegante.
Quizá con esta imagen os hagáis una idea de lo que quería conseguir... Siempre procuro hacer esto aunque tenga un esquema pintado en el cuaderno (¡y en mi cabeza1); en ocasiones corto las telas y luego veo que no me acaban de convencer y vuelvo a guardarlas. Colocarlas antes de coserlas es para mí casi una obligación, a veces cambio uno o dos cuadrados, o los volteo... Tenemos que tener en cuenta que una sola pieza del revés puede dar al traste con la imagen que queramos representar, así que es mejor asegurarnos que todas estén a nuestro gusto antes de empezar a coserlas en su lugar.
Como el resultado final estaba demasiado saturado de rojos, le añadí alrededor una tira en beis para matizar, y lo acabé con un bies a tono con las telas más oscuras.
Añadí al conjunto un jarrón transparente con decoración a juego con el colorido de las telas... aunque tengo algunas ideas más para experimentar con él gracias a pinterest ^^
Aunque las fotografías están tomadas en la galería para que apreciéis mejor los tonos reales de las telas con la luz natural, su sitio definitivo es la mesa del comedor como os dije, y aquí podéis ver cómo queda...
Me parece que queda muy bien con los rojos que resaltan sobre la mesa pero que combinan con el mismo color de la pared del fondo... ¡ahora sólo me falta cambiar estas sillas tannnn horrorosas!
El pequeño detalle de la abeja me está acompañando estos días en más de un trabajo y me siento igual de ocupada que estos insectos, pero sigo teniendo tiempo para pararme a oler las flores :)
¡Gracias de nuevo por estar siempre ahí!
¡Besos y Felices Puntadas!