Como a muchas de nosotras, cuando era niña mi abuela me enseñó a hacer punto, a coser, a hacer punto de cruz, a sacar patrones, a calcular la tela para las cortinas e incluso a coser con su vieja máquina alfa... Lo que no consiguió fue enseñarme a hacer ganchillo, todo lo más que aprendí fue a hacer la cadeneta, así que tenía una cuenta pendiente con ese palito metálico. Así que cuando Paloma anunció sus clases de ganchillo en mi
tienda habitual no dudé un momento en apuntarme y, aunque creo que no soy muy buena alumna, creo que empiezo a coger el truco a este aparato tan simple en principio y con el que tantas dificultades tengo para agarrar bien.
Una vez asentadas las bases (más o menos) y hacer un par de muestras, me decidí a comprar dos madejas de algodón y atreverme con algo más divertido.
Me encantó este color chocolate tan cálido y para combinarlo un beis clarito... me hubiera gustado haber comprado también un tercer color, pero no había ninguno que les fuese bien.
Empecé con un granny clásico y muy sencillo, el primero que hice fue el marrón, con una cadeneta de separación y luego probé con el beis a hacer el mismo diseño pero con dos cadenetas de separación, creo que me gusta más esta segunda opción.
No tengo claro si dejarlos en un sólo color o combinar los dos ovillos, así que de momento los tengo aparcados a la espera de inspiración.
Estuve unos días sin internet y ando bastante descolgada de los blogs, eso sí, adelanté bastante con el LHN xD
Y esta es la última foto del bordado que me ha llegado, espero que los demás vayan también viento en popa.
Nines
¡¡Besos y Felices Puntadas!!